Y encontrar esos pequeños detalles que te hacen ser tan grande.
lunes, 31 de octubre de 2011
miércoles, 26 de octubre de 2011
Todo empieza.
Y entonces le vio. Y comprendió que todo debería de girar a su alrededor. Que era imposible no dedicarle cada nuevo día. Y empezó a crecer como un árbol fuerte y robusto, a creer de nuevo y volver a ver esos grandes amaneceres llenos de luz y color.
Comprendió que si, que después de una gran tormenta siempre llega la calma, con grandes días de sol y noches claras llenas de estrellas que brillan encima de ella.
Ahora está llena de ilusión, ganas de un nuevo día a su lado, con un millón de nuevos descubrimientos por realizar y miles de nuevas historias que siempre recordará.
Parque Ferrera, Avilés.
domingo, 23 de octubre de 2011
martes, 18 de octubre de 2011
Xixón.
Una pequeña y gran cuidad. Llena de gente. Llena de vida.
Me gusta, pero nunca se podrá comparar con la vitalidad y tranquilidad de un pueblo.
Quiero ir a vivir en una casa azul rodeada de naturaleza y con un perro y un gato que se lleven bien.
Quiero cambiar los papeles y visitar de vez en cuando la cuidad y estar siempre en el pueblo.
lunes, 17 de octubre de 2011
domingo, 16 de octubre de 2011
Sin final.
El mar empieza aquí, pero, ¿ves dónde se termina?
No, porque no tiene final.
Playa de Cadaveo, Valdés, Asturies.
miércoles, 12 de octubre de 2011
martes, 11 de octubre de 2011
viernes, 7 de octubre de 2011
miércoles, 5 de octubre de 2011
martes, 4 de octubre de 2011
¿Ves la diferencia entre el mar y el cielo? ¿Has estado alguna vez en el mar? ¿Y en el cielo? Yo en el mar, cientos de veces, en el Mar Cantábrico y en el Mediterráneo, en el Océano Atlántico y en el Pacífico. Y en el cielo, igual no tantas veces, pero las recuerdo todas. Cuando tu mirada tímida busca a la mia, cuando estoy en tus abrazos, cuando abro los ojos y te veo, cuando dices que me vaya acostumbrando a todo esto.
Quiero seguir llegando al cielo juntos.
Desde La Regalina, Cadaveo, Valdés.
lunes, 3 de octubre de 2011
domingo, 2 de octubre de 2011
Adiós Verano. Hola Otoño
Querido Verano:
Este año no sé dónde te metiste, nos dejaste abandonaos por el Norte. Se te echó de menos. Sólo fui dos veces a la playa, y uno de esos días estaba nubláo... Pero bueno, algún día te hiciste ver y te aproveché un poco, pero poco.
No viniste cuando tenías que haber venido, y ahora que ya le toca el turno a Otoño, ¿apareces? ¿Qué pretendes? No, no. Yo ahora no te quiero, te quiero en tu época del año, ahora vete, me has decepcionado. No quiero estar en Octubre con 30˚. Tú ya tuviste tu turno y lo dejaste escapar. Asi que, ya sabes, vete y déjame empezar a poner gorros y bufandas y cazadoras gordas y botas de pelo y guantes y morirme de frío y que alguien me dé abrigo con su chaqueta.
Bienvenido seas, Otoño.
Leti.
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